La mafia de los medicamentos en el sur

Farmacéuticos admiten la existencia de laboratorios truchos en la región. Algunos plantean que el mercado clandestino se centra en robos a farmacias y droguerías, que inducen la venta de medicamentos en kioscos y almacenes, pero hay quienes manifiestan que es un tema que se viene haciendo desde hace mucho tiempo, que falta acciones más jugadas para desbaratar a las bandas de la mafia del medicamento.




En la argentina, los medicamentos desde hace tiempo vienen estando en el centro de la polémica. La venta informal es una actividad pujante, que levanta la voz de las asociaciones de Farmacéuticos. Pero hay algo más grave y preocupante, y es el accionar del mercado negro de medicamentos, y las droguerías clandestinas, ese que según investigaciones mueve anualmente unos 800 millones de pesos.
En el sur del conurbano bonaerense, las federaciones de farmacéuticos denuncian la existencia de laboratorios clandestinos que distribuyen productos de dudosa elaboración. Aseguran que el medicamento mal manipulado, pueden causar daños irreversibles en la salud de los consumidores. Y advierten que se debe investigar en las obras sociales, ya que en esas entidades serian entregadas grandes cantidades de los fármacos, que podrían ser de la red de medicaciones adulteradas.

El mercado negro de medicamentos, cuenta con dos planteos sobre su supuesta conformación. Por un lado se encuentra, la que defienden algunos farmacéuticos y se relaciona con el accionar de bandas de piratas del asfalto, que asaltarían camiones distribuidores de droguerías y farmacias. Y por otro, están aquellos que aducen, que en el conurbano, a la vista de muchos se confeccionaron organizaciones que instalan laboratorios o droguerías clandestinas, que elaboran medicamentos para ser colocados en centros asistenciales y obras sociales.

Según la cámara de farmacéuticos “los remedios son robados por bandas que se dedican a vaciar farmacias y que después se los venden a otras “farmacias inescrupulosas del interior o se distribuyen a través de “canales alternativos” como kioscos, estaciones de servicio o ferias como La Salada” aseguran. Además destacan que “los fármacos más apetecibles para los delincuentes son los recetados para el tratamiento de enfermedades especiales, como los oncológicos, los retrovirales para el sida, y las drogas para los pacientes trasplantados, cuyo valor oscila entre los 500 y los 5 mil pesos por unidad”.

Ante la explicación de la Cámara Nacional de Farmacéuticos, el titular de la Federación que los nuclear en Florencio Varela, Raúl Aon, aclara que el accionar de bandas de piratas del asfalto es real, pero que también “se han allanado lugares donde se han detectado medicamentos de consumo común, como Bayaspirina, Buscapina y Sertal, que son muy fácilmente plagiados sus blistes. En algunos casos, se ha encontrado que no tienen nada de medicamentos, solo polvo, pero al no contar con los métodos de producción adecuados terminan siendo muy prejudicial para la salud” dice el profesional.
En el marco del mercado negro de fármacos, el profesional varelense, denuncia que “acá evidentemente hay una mafia tan armada, que es muy difícil ir contra eso, pero hay que hacerlo por el bien de la gente”. Y aclara que la modalidad “lamentablemente no es de ahora, se viene haciendo desde hace mucho tiempo. Lo que pasa es que se van descubriendo las cosas, salen a la luz. Esto es algo muy grave que hay que tratar de ir eliminando porque está en juego la salud de la gente” sentencia Aon.

CLANDESTINOS O NO

Aunque no se niega la existencia de robos de camiones transportistas de fármacos, o de droguerías. Las estadísticas sobre sustracciones a nivel nacional, hablan de una reducción notablemente de hechos con la incorporación de sistemas de rastreo satelitales.
Para algunos integrantes de instituciones que nuclean a los farmacéuticos, el accionar de las mafias que producen medicamentos truchos, no sería nada nuevo, y contaría con el respaldo de inescrupulosos, que juegan con la vida de la gente, con el solo fin de adquirir más dinero. Para el respetado farmacéutico varelense Aon, pero esto es algo muy grave, que hay que tratar de ir eliminando porque está en juego la salud de la gente. Y aclara que “lamentablemente esto no es de ahora, se viene haciendo desde hace mucho tiempo, lo que pasa es que se van descubriendo las cosas, salen a la luz, pero necesitamos que se haga un trabajo fuerte contra esto que es una mafia”.
Desde las cámaras que nuclean a los farmacéuticos recalcan el accionar de mafiosos en el tema, que mueven millones de pesos en fármacos, y en la que también participan de manera cautelosa laboratorios legales y clandestinos, que con el objetivo de obtener dinero a costa de la vida de cientos de personas, elaboran o adulteran medicamentos.





VENTA DE MEDICAMENTO TRUCHOS AL ESTADO

Esta no es la primera vez que se denuncia a la mafia de los medicamentos con las áreas de salud gubernamentales. Mientras, Graciela Ocaña estaba a cargo del Ministerio de Salud de la Nación, la funcionaria había presentado varias acusaciones entre las que se encontraba una contra una droguería por la venta irregular de medicamentos para hemofílicos del PAMI.
Ahora en setiembre del 2009, Alberto Costa, el segundo del Ministro de Salud bonaerense, debió dejar su cargo dado a que figura dentro de una investigación que lleva adelante el Juez Federal Oyarbide.
Según el magistrado federal, que investiga el comercio ilegal de medicamentos, Costas habría mantenido comunicaciones telefónicas comprometedoras con el empresario Néstor Lorenzo, dueño de la Droguería San Javier que presuntamente vendía medicamentos para el HIV y oncológicos adulterados.
Además Lorenzo, según los investigadores del Triple Crimen de General Rodríguez, figurara en dicha causa, ya que mantenía vínculos empresariales con Sebastián Forza, una de las victimas, y sería llamado a declarar como testigo en la investigación que desarrolla el juez de Zárate-Campana, Federico Faggionato Márquez.
Al conocerse la detención del empresario Lorenzo, y la desvinculación en el gobierno provincial de Costa, la ex ministra de Salud nacional Ocaña afirmó en que “hay 400 denuncias por medicamentos adulterados en la ANMAT (Administración Nacional de Medicamentos Alimentos y Tecnología) y que en una de ellas aparece vinculado el nombre de Farma Group, “la droguería de la cual era socio David Ferrón”, aseguró la ex funcionaria.

LA MAFIA DE LOS MEDICAMENTOS Y LA RUTA DE LA EFEDRINA
La aparición sin vida en agosto del 2008, de tres empresarios vinculados con la venta de fármacos (Sebastián Forza, Damián Ferrón y Leopoldo Bina) cuyos cuerpos fueron encontrados en un campo de General Rodríguez, salió a la luz la existencia en el país de una red que comercializaba precursores químicos, para la producción de efedrina, una drogas de exportación.
La muerte de los empresarios, luego derivo en investigaciones que se centraron en la “ mafia de los medicamentos" y en “la ruta de la efedrina”, que abrió un abanico de allanamientos en droguería en todo el territorio bonaerense. Una de ellas recayó en el padre del famoso actor Mariano Martínez, también se vinculó con el Rey de la Efedrina. Los últimos detenidos en dicha investigación fueron Mario Roberto Segovia, su esposa, su primo Sebastián y los ciudadanos mexicanos Alberto Domínguez Martínez y Salvador de la Cruz Acuña. Estos están actualmente procesados por su participación en la producción, fabricación y comercio de estupefacientes, así como en la introducción al país de materias primas como la efedrina para utilizarla como precursor químico.


LAS OBRAS SOCIALES EN EL OJO DE LA TORMENTA
Con la detención de Néstor Lorenzo, salió a la luz, la entrega de medicación adulterada a las obras sociales, pero para el farmacéutico Aon, éstos no sería nada nuevo, ya que “se detectaron droguerías falsificadoras, que confeccionan troqueles de medicamentos, y que son estos estafan a las obras sociales. En las recetas colocan troqueles falsificado que son presentadas a la obra Social, por medicación que no es adquirida por el afiliado, y esta modalidad afecta a la institución y a quien adquiere el producto”.
Por otro lado, manifiesta el profesional que a “las obras sociales adquieren medicamento que los entregan de forma directa, y esto a veces no es conveniente, porque se compra una partida y puede suceder que la adquisición sea de dudosa procedencia, y esto debería estar controlado” sentencia Aon.
Algo similar fue denunciado con la detención de Lorenzo, ya que su droguería “San Javier” proveía medicamentos oncológicos y de HIV a obras sociales, básicamente a la Bancaria. “Es increíble que haya gente que este lucrando con estas cosas, pero esto es algo muy grave que hay que tratar de ir eliminando porque está en juego la salud de la gente” sentenció el presidente de la Federación de Farmacéuticos de Varela, Aon.



LOS NÚMEROS QUE MUEVEN LOS MEDICAMENTOS

Un informe realizado por el Colegio Argentino de Farmacéuticos y Bioquímicos, plantea que los remedios falsificados mueven el diez por ciento del mercado farmacéutico del país. Ante este avance, los farmacéuticos del conurbano reclaman “la falta de control que permite que el mercado negro de los remedios siga avanzando”.
En Lomas de Zamora, el titular de Farmacéuticos, Leonardo Fernández, expone que “hay una ordenanza municipal que prohíbe la venta de cualquier tipo de medicamentos en lugares que no sean farmacias, pero el control es muy pobre” y destaca que “el único canal comercial legal es: la industria farmacéutica, las droguerías y la farmacias” sentencio Fernández.
Sobre el mismo tema los Farmacéuticos de Esteban Echeverría recomiendan que “todos los clientes deberían toman conciencia de lo importante que es comprar en lugares habilitados, porque lo que está en juego es la salud”.
En el resto de la región, las instituciones que nuclean a Bioquímicos y Farmacéuticos, aseguran que la realidad actual es muy grave, ya que los remedios falsificados ya mueven el diez por ciento del mercado farmacéutico del país. Es decir, los fármacos ilegales facturan 1.300 millones de pesos por año, contra los 13.000 millones de pesos de los productos habilitados.
Asimismo, las estimaciones oficiales señalan que en el país hay 300 laboratorios medicinales, 400 droguerías y 12.000 farmacias, lo que dificulta su inspección y fiscalización. A esto se le deben sumar cerca de 60.000 kioscos, 25.000 supermercados, 4.000 estaciones de servicios y 3.000 gimnasios, todas vías habituales de venta de diferentes medicamentos.