La mujer recibió el llamado que soñó por más de 45 años. Su madre vive en La Carolina de Florencio Varela, junto a su hermana Ramona. El reencuentro será en los próximos días cuando su madre celebre sus 72 años.
“Estoy muy feliz, sin palabras” exclama muy
emocionada Elba Beatriz Ojeda, no es para menos. Luego de 45 años sin saber
nada de su madre, finalmente a través de una llamada telefónica pudo oír por
primera vez la voz de esa mujer, que según le relataron la dejó abandonada en
el Chaco. Ahora comenzará el largo camino de darse ese abrazo tan añorado, y de
interminables charlas para recobrar sus historias.
La semana pasada conocimos a través de INFOSUR
DIARIO, la historia de Elba Beatriz una mujer oriunda de González Catán, que a
partir de la red social Facebook inició la búsqueda de su origen, encontrar a su madre y hermana.
La alegría para esta mujer, llegó en el mediodía del
pasado martes, cuando recibió una llamada telefónica, en donde la voz del otro
lado le decía “Hola soy tu mamá”. “Pasado el mediodía, del martes 3, recibí un
llamado y era mi mamá” cuenta con alegría Elba.
“Tome el teléfono y preguntaron quién era. Cuando
dije mi nombre del otro lado, me dijo soy tu mamá. Y me quedé sin palabras soqueada,
muda. Me senté, respire llorando y no podía reaccionar” relata.
“La verdad que la solidaridad de la gente, y de
ustedes del diario me dejaron sin palabras. Hasta ahora tengo una mezcla de
sensaciones, de sentimientos. Tengo ganas de salir corriendo hacia Varela, de
llorar, de abrazar a mis hijas. Y por momentos me quedo sin palabras” cuenta
aun emocionada al ver su sueño de reencontrarse con su madre.
MISION
CUMPLIDA
En su clamor de búsqueda, Elba Beatriz Ojeda
aseguraba que quería reencontrarse con su madre y hermana para cerrar su
historia. Y al tomar contacto con su
sueño hecho realidad comenta la mujer “Lo primero que me dijo fue te quiero ver
ya. Y no sé cómo va a ser nuestro
encuentro, porque la última vez que nos
vimos yo tenía 3 añitos y hoy tengo 48. Lo único que sé es que de alguna manera
nos vamos a reconocer”.
“Esto va a ser algo nuevo, yo no recuerdo nada de ella. Siento que la voy a ver por primera vez conscientemente después de tantos años. La voy a conocer recién ahora” sentencia emocionada.
RAMONA SU HERMANA
Uno de los recuerdos que siempre guardó Elba fue la
existencia de una hermana menor de nombre Ramona, con quién también pudo
reencontrarse a través de un teléfono.
“Mi hermana estaba con mi mamá. Ahora sé que mis recuerdos eran reales,
pude hablar con ella y me manifestó que siempre pensaron en mí, y que las iba a
buscar. Que soñaban que apareciera en algún programa de televisión
buscándolas”.
EL REENCUENTRO
La verdad que
me siento muy feliz porque mi mamá el 17 de julio cumple sus años, y yo muchas
veces le pedí a Dios que me ayude a encontrarla antes de esa fecha o para el día de la madre y se me cumplió ese sueño. Y se lo tengo que
agradecer a toda la gente que se sumó a mi búsqueda. Esto es algo que siempre
soñé y aun no lo puedo creer” manifiesta Elba.
MUCHA FELICIDAD POR LA AYUDA BRINDA
La mujer oriunda de González Catan, en su emisión no
deja de olvidarse de las personas que colaboraron en su búsqueda. “Ustedes
desde el diario hicieron mucho por mí, también quiero agradecerle a los que se
contactaron por el Facebook o por el correo mandándome su apoyo, y hasta
aquellos como la señora Norma C., una mujer de la policía bonaerense, que me
dio datos, direcciones y que fue un pilar para encontrar a mi mamá y a mi hermana. No se cómo agradecerles toda
la solidaridad”.
LA HISTORIA QUE NUNCA SUPO
Muchas fueron las preguntas que rondaron la cabeza
de Elba durante más de 45 años, preguntas que a sus 489 está comenzando a
tener. Según nos relató en pocas palabras con su madre, ésta le contó que “ella
siempre me buscó, y mi hermana Ramona tenía pensado ir a los medios, pero
tenían miedo. Ellas siempre tuvieron fe de que yo las iba a encontrar”.
En referencia al medio que plantea Elba, relata que “según
me dio a entender mi mamá, mi papá me sacó de los brazos de ella cuando tenía 3
años. Y ella tenía miedo de buscarme, y hasta creía que yo seguía viviendo en
el Chaco”.
SU LARGA BUSQUEDA
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