Dictó clases en varias escuelas varelenses. En todos ellas, enseñó más que lengua y matemáticas. Llevó adelante su experiencia de vida y de lucha para cumplir su sueño de ser maestra. De las aulas, y mucho más con Inés Medina.
El pasado 14 de Abril, Inés Medina, celebró sus 50 años en la docencia. Gran parte de sus enseñanzas las desarrolló a lo largo y ancho del territorio varelense. Pasó por escuelas rurales, céntricas y barriales, en todas dejó no solo conocimientos, sino un trabajo en la comunidad con vistas al mejoramiento de los chicos en las aulas y fuera de ellas. Aquí un homenaje y reconocimiento a “La Señora Maestra”.
Inés recuerda que su inicio en la educación fue un 13 de abril, cuando recibió una nota en la que le decían que si estaba libre que si podía tomar una suplencia en la Escuela 5 de Villa San Luis, y “así fue el 14 de abril de 1961, yo tomé mi primera suplencia en la escuela. A partir de allí fueron corriendo los años con mi paso en muchos establecimientos”.
¿Cómo surgió su vocación con la docencia?
Terminando mi sexto año, mi maestra María Elena, que venía desde Quilmes, reunió a los padres de los tres primeros alumnos egresados de la escuela 14 para decirles que había visto en esas chicas de barrio, entre ellas yo, que podían seguir estudiando, que no podían quedarse así, y que teníamos que seguir estudiando. A cada una nos dio un panorama de lo que teníamos que seguir. A mí me dijo que yo siga magisterio y no se equivocó.
¿Cómo y dónde se estudiaba en aquellos años para ser maestra?
En esos años, en Varela sólo se dictaban las clases de magisterio en el Sagrado Corazón y por ciertas razones no pude ingresar.
¿Pero no bajo los brazos y buscó seguir ese sueño?
Mi maestra me invitó a que le escribiera una carta al Ministro de Educación de la Nación Atilio Dell'Oro Maini, ahí le plantie que quería inscribirme en magisterio en Quilmes, pero que mi maestra me estaba preparando pero que había cerrado la inscripción.
¿Y llegó alguna respuesta a esa carta?
Si, un día en la Curva, el cartero –Tito Berraymundo- me dijo que había un telegrama para mí. Y fue grande la alegría al ver que el ministro me decía que me presentara con la documentación que me iban a inscribir en el Normal de Quilmes. Ese fue el principio de lo que fue para mi todo esto.
¿Por cuantas escuelas pasó en estos 50 años?
El comienzo fue el 14 de abril de 1961, yo tomé mi primera suplencia en la escuela 5 de Villa San Luis. Luego la 8, 20, 21, 12 y la 14 en esa última fue donde finalice mi 6to grado. Ahora estoy en el final de mi carrera, porque me estoy jubilando, pero pienso que mi carrera se enmarco gracias a esa visión de mi maestra me marcó para ser docente.
¿Qué recuerdos tiene de aquellos años en las aulas varelenses?
Un recuerdo que me viene a la mente, es el paso por la escuela 12. Allí no teníamos patio, teníamos una casilla de chapa y pisos. Yo ingrese un 30 de marzo y para el acto del 25 de mayo habíamos construido medio patio gracias a los padres y con la confianza de un corralón, que confió en una maestra. Recuerdo que el dueño del corralón nos dio un crédito y con eso hicimos el patio donde festejamos el 25 de mayo.
¿Aquella acción de su maestra la marcó a fuego?
Si, lo que vio esa maestra en mi, me marcó, y yo en mi carrera docente, traté de actuar de la misma manera, incentivando a los chicos a ser algo más, a cumplir sus sueños.
Como docente de 50 años de experiencia, ¿qué consejos les daría a los maestros de hoy y del futuro?
En las escuelas, a las maestras, nos esperan personas que ponen en nosotros muchísimas esperanzas. Vienen con ganas y dependen de nosotros que esas ganas continúen. Me gustaría que se interesen en ellos. Como consejo, que nos acepten de acuerdo a lo que nosotros podemos enseñarles para hacerse valorar. Siento y creo por mi experiencia que los chicos son capaces de muchas cosas, de cumplir sus sueños, de insertarse en la sociedad, de seguir estudiando.
INES SE DESEMPEÑO DURANTE ALGUNOS AÑOS COMO PRESIDENTE DEL CONSEJO ESCOLAR DE FLORENCIO VARELA.
Allí, llevo adelante varias tareas para dotar a los establecimientos escolares varelenses de gas, incluso ella misma fue la que viajaba a La Plata o Quilmes para cotejar contratos de instalaciones.
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