A dos años de su implementación, la norma que obliga a locales de ropa a proveer de todos los talles no se cumple. Una odisea que afecta a gorditos y no tantos.
En verano y en invierno, las personas con algunos kilitos de más deben enfrentar una odisea, recorriendo cientos de locales, para poder adquirir alguna prenda que les quede bien y que esté a la moda. En caso contrario, de no existir modelos y talles para sus cuerpos deberán ingeniárselas y recurrir a los sastres y modistas de barrios. La problemática de los talles, no es nada común, se data todos los años, y aunque cuenta con una resolución nacional, aún a dos años de su implementación nadie la cumple. Días atrás, según un informe de entidades del consumidor, expuso que en el territorio bonaerense, “el 75% de los comercios no cumplen con la Ley de Talles” y que desde su puesta en vigencia, hasta el momento no se aplicaron multas a los infractores.
En Marzo del pasado año la ONG de Defensa del Consumidor –CODEC- expuso que el 95% de los locales recorridos en el shopping UNICENTER de la cadena CENCOSUD, ubicado en la zona Oeste y Norte del Conurbano, se encontraban infringiendo la Ley de Talles. Pero no hay que ir muy lejos para notar que ese casi 100 por ciento de incumplimiento, ya que en el conurbano sur, también sucede lo mismo, en Centros Comerciales, locales, tiendas, boutiques de alta costura, y hasta en ferias.
A finales del 2006, era pomposamente aprobada la “La Ley de talles”, que con su aprobación pretende luchar contra los graves males de la bulimia, la anorexia, y la discriminación en el universo de mujeres adolescentes, pero hasta el momento, personas con sobrepeso y muy flaca, pasando por personas con estatura alta o muy baja, se ven con el impedimento de adquirir una indumentaria acorde a su físico.
Aunque la norma que rige en todo el país, contempla multas desde los $ 100 hasta los $ 5.000.000 llegando incluso, hasta el decomiso de la mercadería o la clausura del establecimiento. La mima no cuenta con el debido control, y según estimaciones de la ONG CODEC, de dos años hacia atrás ningún comercio denunciado por infringir la ley de talles ha pagado multas.
75 POR CIENTO DE LOS LOCALES NO CUMPLEN LA NORMA
Tras conocerse la estadística de la ONG de Derecho del Consumidor, desde el Gobierno Provincial se reconoció la existencia de un promedio elevado de incumplimiento de los comerciantes de indumentarias de vestir y sport, en relación a la ley de talles. Cifra que a su vez, fue verificada por la diputada de la Coalición Cívica Liliana Piani, y que rondaría el orden del 75% .
En referencia a la norma, la diputada Piani manifestó que “No solamente los comercios están incumpliendo con la norma, sino que también incumple el Gobierno, ya que la ley prevé la aplicación de multas y a pesar de haber encontrado incumplimientos no ha multado a los comerciantes”.
Por otro lado, el trabajado de la asociación de Derechos del Consumido, refleja que la norma provincial también es infringida en los 134 municipios de la Provincia de Buenos Aires, ya que se habrían encontrado casos de infracción de la ley de talles, pero los comerciantes no habrían recibido multa.
Para la funcionaria provincial, la ley que puso como ejemplo a la provincia, ya que a raíz de esta se comenzaba a dejar de lado la discriminación a las personas por su porte físico, “aún no se cumple, y mucho menos con la rigidez con la que debería”, aseguró la representante de la Coalición Cívica.
AHORA LA LEY VELARA POR LA ROPA MASCULINA
Los hombres tendrían también más números para calzarse la ropa. Y es que si bien la bulimia, la anorexia y la discriminación en los parámetros estéticos se cree que afectan primordialmente a las mujeres jóvenes y adolescentes, el otro género no está exento.
Por ello, gracias a una modificación aprobada por Cámara de Diputados bonaerense, la denominada Ley de Talles bonaerense acaba de sumar nuevos beneficiarios. Así los comercios que vendan ropa masculina deberán contar con todas las medidas.
El proyecto, que ahora deberá ser abordado por el Senado, fue impulsado por los legisladores Luis Bruni y Dulce Granados, quienes plantearon que la polémica norma debe ampliar sus alcances. "El Estado tiene la obligación de velar por el bienestar de la población en general y en ello se incluye en que tanto mujeres como hombres tengan acceso a la vestimenta de acuerdo a sus características físicas y no a medidas virtuales", indicó Granados.
El proyecto establece además que los comercios, una vez que sea sancionada la ley, tendrán seis meses para cumplir con las nuevas exigencias.
EN LA ZONA SUR TODO SIGUE IGUAL
Un año atrás un relevamiento realizado por INFOSur Diario en comercios de indumentaria destinados al mercado adolescente, constató que los talles eran pequeños (S, M, L, XL ó 0 al 5) aún con la ley Provincial que obliga a tener tamaños grandes en sus locales. Hoy un tiempo atrás todo sigue sin cambio, los gorditos luchan incansablemente por comprar una prenda a la moda en los centros comerciales.
En las vidrieras de los negocios de la peatonal del centro de Florencio Varela están plagadas de prendas de colores vivaces y diseños para todos los gustos, pero no para todos los talles. Las adolescentes aunque aseguran que encuentran modelos para su porte, aseguran que la ropa “cada vez viene más chica” y que “deben adaptarse a los modelos y colores de la temporada que imponen las marcas y los estándares de moda”.En vísperas de las fiestas, es el momento en que muchos recorrer las peatonales o centros comerciales, para comprar ropa a estrenar en la noches con la familia, pero para algunos esa tardes alegres de compras no son muy felices, porque con algunos kilitos de más, comprar una prenda a la moda y barata es una odisea. Y se sufre durante todo el año.
Alejandra R, 36 años, varelense, recién se está recuperando de dar a luz a su segundo hijo, Alex, y comenta que “mi bebé tiene 4 meses, y veo la ropa en las tiendas y nada me queda. Me gustan pero cuando pregunto por que talles tienen, me dicen. NO mamá para vos no entraron esta semana, vení la próxima. Yo se que estoy con algunos kilos, pero me parece que si hay una ley deberían tener ropa para todos los talles, no discriminarnos como lo hacen” aseguró ofuscada.
Por su parte, Sonia G, de 30 años, con sus 75 kilos manifiesta que “encontrar algo para ponerte se puede tornar una odisea cuando se tienen unos kilos de más. Me canso de recorrer la Monteagudo, Rivadavia o La 14, mirando en las vidrieras ropa que no puedo ponerme, porque cuando pregunto me dicen que no hay de mi talle. Todo lo que hay es de tamaño pequeño” dijo la vecina de Villa España, trabaja en Florencio Varela.
DESDE HACE DOS AÑOS Y NADA HA CAMBIADO
En la provincia de Buenos Aires, desde el 21 de diciembre del año 2006, rige la Ley 12.665 para los comercios de indumentaria destinados a adolescentes mujeres. La misma indica que los comercios que vendan ropa femenina, deben tener en existencia todos los talles correspondientes a las medidas antropométricas de la mujer adolescente. Asimismo, aquellos comerciantes que no cumplan con lo dispuesto en el estatuto se les impondrá una multa y en casos de incumplimientos reiterados, se dispondrá la clausura de hasta 5 días del establecimiento.
Los centros de Defensa al Consumidor ubicados en la provincia de Buenos Aires, son los encargados de recepcionar diariamente las quejas de mujeres que expresan su desagrado por el incumplimiento de la Ley 12.665. Según se declara desde la entidad madre defensora de los compradores, las afectadas remarcan que si se controlase de manera seria a los negocios no tendrían "tantas dificultades en encontrar vestimenta”.
NO SE DEJE ENGAÑAR, DEBE HABER TALLES PARA TODAS
A raíz, de la odisea que enfrentan mujeres, jóvenes y no tanto, al recorrer los centros comerciales de la región: Florencio Varela, Almirante Brown, Quilmes, Lomas de Zamora, Lanús y Quilmes, para comprar prendas de vestir, y se encuentran que sus talles no existen, o porque cuentan con algunos kilitos de más, o porque sus medidas superan los 90, 60, 90. La “Fundación Mujeres en Igualdad”, lanzó una nómina de las violaciones más comunes en los comercios de la provincia en la llamada “Ley de Talles”. Según, la presidenta de Mujeres en Igualdad, Ema Cibotti, la principal violación a la ley de talles es: El artículo 3 de la disposición 478 de la Dirección Provincial de Comercio, encargada de implementar la Ley de Talles, es claro: “La confección textil deberá realizarse conforme al sistema de talles normalizados para la indumentaria dispuesto en las normas IRAM 75.310 (que dispone como talles obligatorios desde el 38 al 48, con sus respectivas medidas corporales).
LAS IRREGULARIDADES MÁS ENCONTRADAS
Dentro de las irregularidades encontradas en el relevamiento figuran: La denominación de los talles son, a menudo, “talle único”, “talle 1-2-3-4”, “Small, Medium, Large”, y “talles 19, 21, 26. 28, 37”. Estos no definen sus equivalencias en las normas IRAM, tal como lo establece la ley, y la mayoría de los empleados consultados las desconocen. Las etiquetas identificatorias no tienen las medidas corporales, como obliga la ley. En la mayoría de los locales sólo tienen hasta el talle 42. En algunos declaran no trabajar el 48. En otros, sólo tienen en exhibición los talles 1 y 2 que consideran talles “Standard”. En algunos casos, la numeración de los talles induce al engaño: por ejemplo, se marca una prenda como talle 46 cuando sus dimensiones corresponden a un 40. Ademas, destaca la presidenta de Mujeres en Igualdad, que “La ley no sólo obliga a los locales a vender ropa de todos los talles; también obliga a fabricantes, distribuidores e importadores, cuando se trata de ropa comercializada en la provincia. Además, determina que, “cuando la venta se realice por Internet o por catálogo, la oferta deberá incluir y precisar todos los datos obligatorios del etiquetado junto con las del talle”. “La falta de prendas para todos los talles es un problema grave y muy excluyente. No hay ropa para cuerpos reales, y algunas marcas se niegan a hacer talles más grandes porque temen por la deformación de su ropa”, denunció Cibotti.
En verano y en invierno, las personas con algunos kilitos de más deben enfrentar una odisea, recorriendo cientos de locales, para poder adquirir alguna prenda que les quede bien y que esté a la moda. En caso contrario, de no existir modelos y talles para sus cuerpos deberán ingeniárselas y recurrir a los sastres y modistas de barrios. La problemática de los talles, no es nada común, se data todos los años, y aunque cuenta con una resolución nacional, aún a dos años de su implementación nadie la cumple. Días atrás, según un informe de entidades del consumidor, expuso que en el territorio bonaerense, “el 75% de los comercios no cumplen con la Ley de Talles” y que desde su puesta en vigencia, hasta el momento no se aplicaron multas a los infractores.
En Marzo del pasado año la ONG de Defensa del Consumidor –CODEC- expuso que el 95% de los locales recorridos en el shopping UNICENTER de la cadena CENCOSUD, ubicado en la zona Oeste y Norte del Conurbano, se encontraban infringiendo la Ley de Talles. Pero no hay que ir muy lejos para notar que ese casi 100 por ciento de incumplimiento, ya que en el conurbano sur, también sucede lo mismo, en Centros Comerciales, locales, tiendas, boutiques de alta costura, y hasta en ferias.
A finales del 2006, era pomposamente aprobada la “La Ley de talles”, que con su aprobación pretende luchar contra los graves males de la bulimia, la anorexia, y la discriminación en el universo de mujeres adolescentes, pero hasta el momento, personas con sobrepeso y muy flaca, pasando por personas con estatura alta o muy baja, se ven con el impedimento de adquirir una indumentaria acorde a su físico.
Aunque la norma que rige en todo el país, contempla multas desde los $ 100 hasta los $ 5.000.000 llegando incluso, hasta el decomiso de la mercadería o la clausura del establecimiento. La mima no cuenta con el debido control, y según estimaciones de la ONG CODEC, de dos años hacia atrás ningún comercio denunciado por infringir la ley de talles ha pagado multas.
75 POR CIENTO DE LOS LOCALES NO CUMPLEN LA NORMA
Tras conocerse la estadística de la ONG de Derecho del Consumidor, desde el Gobierno Provincial se reconoció la existencia de un promedio elevado de incumplimiento de los comerciantes de indumentarias de vestir y sport, en relación a la ley de talles. Cifra que a su vez, fue verificada por la diputada de la Coalición Cívica Liliana Piani, y que rondaría el orden del 75% .
En referencia a la norma, la diputada Piani manifestó que “No solamente los comercios están incumpliendo con la norma, sino que también incumple el Gobierno, ya que la ley prevé la aplicación de multas y a pesar de haber encontrado incumplimientos no ha multado a los comerciantes”.
Por otro lado, el trabajado de la asociación de Derechos del Consumido, refleja que la norma provincial también es infringida en los 134 municipios de la Provincia de Buenos Aires, ya que se habrían encontrado casos de infracción de la ley de talles, pero los comerciantes no habrían recibido multa.
Para la funcionaria provincial, la ley que puso como ejemplo a la provincia, ya que a raíz de esta se comenzaba a dejar de lado la discriminación a las personas por su porte físico, “aún no se cumple, y mucho menos con la rigidez con la que debería”, aseguró la representante de la Coalición Cívica.
AHORA LA LEY VELARA POR LA ROPA MASCULINA
Los hombres tendrían también más números para calzarse la ropa. Y es que si bien la bulimia, la anorexia y la discriminación en los parámetros estéticos se cree que afectan primordialmente a las mujeres jóvenes y adolescentes, el otro género no está exento.
Por ello, gracias a una modificación aprobada por Cámara de Diputados bonaerense, la denominada Ley de Talles bonaerense acaba de sumar nuevos beneficiarios. Así los comercios que vendan ropa masculina deberán contar con todas las medidas.
El proyecto, que ahora deberá ser abordado por el Senado, fue impulsado por los legisladores Luis Bruni y Dulce Granados, quienes plantearon que la polémica norma debe ampliar sus alcances. "El Estado tiene la obligación de velar por el bienestar de la población en general y en ello se incluye en que tanto mujeres como hombres tengan acceso a la vestimenta de acuerdo a sus características físicas y no a medidas virtuales", indicó Granados.
El proyecto establece además que los comercios, una vez que sea sancionada la ley, tendrán seis meses para cumplir con las nuevas exigencias.
EN LA ZONA SUR TODO SIGUE IGUAL
Un año atrás un relevamiento realizado por INFOSur Diario en comercios de indumentaria destinados al mercado adolescente, constató que los talles eran pequeños (S, M, L, XL ó 0 al 5) aún con la ley Provincial que obliga a tener tamaños grandes en sus locales. Hoy un tiempo atrás todo sigue sin cambio, los gorditos luchan incansablemente por comprar una prenda a la moda en los centros comerciales.
En las vidrieras de los negocios de la peatonal del centro de Florencio Varela están plagadas de prendas de colores vivaces y diseños para todos los gustos, pero no para todos los talles. Las adolescentes aunque aseguran que encuentran modelos para su porte, aseguran que la ropa “cada vez viene más chica” y que “deben adaptarse a los modelos y colores de la temporada que imponen las marcas y los estándares de moda”.En vísperas de las fiestas, es el momento en que muchos recorrer las peatonales o centros comerciales, para comprar ropa a estrenar en la noches con la familia, pero para algunos esa tardes alegres de compras no son muy felices, porque con algunos kilitos de más, comprar una prenda a la moda y barata es una odisea. Y se sufre durante todo el año.
Alejandra R, 36 años, varelense, recién se está recuperando de dar a luz a su segundo hijo, Alex, y comenta que “mi bebé tiene 4 meses, y veo la ropa en las tiendas y nada me queda. Me gustan pero cuando pregunto por que talles tienen, me dicen. NO mamá para vos no entraron esta semana, vení la próxima. Yo se que estoy con algunos kilos, pero me parece que si hay una ley deberían tener ropa para todos los talles, no discriminarnos como lo hacen” aseguró ofuscada.
Por su parte, Sonia G, de 30 años, con sus 75 kilos manifiesta que “encontrar algo para ponerte se puede tornar una odisea cuando se tienen unos kilos de más. Me canso de recorrer la Monteagudo, Rivadavia o La 14, mirando en las vidrieras ropa que no puedo ponerme, porque cuando pregunto me dicen que no hay de mi talle. Todo lo que hay es de tamaño pequeño” dijo la vecina de Villa España, trabaja en Florencio Varela.
DESDE HACE DOS AÑOS Y NADA HA CAMBIADO
En la provincia de Buenos Aires, desde el 21 de diciembre del año 2006, rige la Ley 12.665 para los comercios de indumentaria destinados a adolescentes mujeres. La misma indica que los comercios que vendan ropa femenina, deben tener en existencia todos los talles correspondientes a las medidas antropométricas de la mujer adolescente. Asimismo, aquellos comerciantes que no cumplan con lo dispuesto en el estatuto se les impondrá una multa y en casos de incumplimientos reiterados, se dispondrá la clausura de hasta 5 días del establecimiento.
Los centros de Defensa al Consumidor ubicados en la provincia de Buenos Aires, son los encargados de recepcionar diariamente las quejas de mujeres que expresan su desagrado por el incumplimiento de la Ley 12.665. Según se declara desde la entidad madre defensora de los compradores, las afectadas remarcan que si se controlase de manera seria a los negocios no tendrían "tantas dificultades en encontrar vestimenta”.
NO SE DEJE ENGAÑAR, DEBE HABER TALLES PARA TODAS
A raíz, de la odisea que enfrentan mujeres, jóvenes y no tanto, al recorrer los centros comerciales de la región: Florencio Varela, Almirante Brown, Quilmes, Lomas de Zamora, Lanús y Quilmes, para comprar prendas de vestir, y se encuentran que sus talles no existen, o porque cuentan con algunos kilitos de más, o porque sus medidas superan los 90, 60, 90. La “Fundación Mujeres en Igualdad”, lanzó una nómina de las violaciones más comunes en los comercios de la provincia en la llamada “Ley de Talles”. Según, la presidenta de Mujeres en Igualdad, Ema Cibotti, la principal violación a la ley de talles es: El artículo 3 de la disposición 478 de la Dirección Provincial de Comercio, encargada de implementar la Ley de Talles, es claro: “La confección textil deberá realizarse conforme al sistema de talles normalizados para la indumentaria dispuesto en las normas IRAM 75.310 (que dispone como talles obligatorios desde el 38 al 48, con sus respectivas medidas corporales).
LAS IRREGULARIDADES MÁS ENCONTRADAS
Dentro de las irregularidades encontradas en el relevamiento figuran: La denominación de los talles son, a menudo, “talle único”, “talle 1-2-3-4”, “Small, Medium, Large”, y “talles 19, 21, 26. 28, 37”. Estos no definen sus equivalencias en las normas IRAM, tal como lo establece la ley, y la mayoría de los empleados consultados las desconocen. Las etiquetas identificatorias no tienen las medidas corporales, como obliga la ley. En la mayoría de los locales sólo tienen hasta el talle 42. En algunos declaran no trabajar el 48. En otros, sólo tienen en exhibición los talles 1 y 2 que consideran talles “Standard”. En algunos casos, la numeración de los talles induce al engaño: por ejemplo, se marca una prenda como talle 46 cuando sus dimensiones corresponden a un 40. Ademas, destaca la presidenta de Mujeres en Igualdad, que “La ley no sólo obliga a los locales a vender ropa de todos los talles; también obliga a fabricantes, distribuidores e importadores, cuando se trata de ropa comercializada en la provincia. Además, determina que, “cuando la venta se realice por Internet o por catálogo, la oferta deberá incluir y precisar todos los datos obligatorios del etiquetado junto con las del talle”. “La falta de prendas para todos los talles es un problema grave y muy excluyente. No hay ropa para cuerpos reales, y algunas marcas se niegan a hacer talles más grandes porque temen por la deformación de su ropa”, denunció Cibotti.
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